¿Por qué es esencial tener un reglamento firmado en un condominio o plaza comercial?
- Alberto Medina
- 27 ago
- 1 Min. de lectura
Tener un reglamento debidamente firmado y, cuando aplica, registrado, puede marcar la diferencia entre una convivencia armoniosa y una fuente constante de roces. Aquí te dejo algunas razones clave para incluir como consejos en tu blog:

1. Claridad: derechos y obligaciones bien definidos
Un reglamento interno establece claramente los derechos y obligaciones de los residentes o comerciantes, marcando límites sobre el uso de espacios comunes, previsión de sanciones y normas de convivencia. Esto ayuda a evitar malentendidos y posibles conflictos.
2. Previene y gestiona conflictos
Contar con reglas bien comunicadas reduce roces entre vecinos o locatarios. Además, sirve como referencia clara para resolver disputas objetivamente.
3. Seguridad y calidad de la convivencia
Un reglamento permite establecer disposiciones concretas sobre seguridad —como control de acceso, cámaras, horarios y usos permitidos—, lo cual favorece un entorno más seguro y ordenado.
4. Valor legal y respaldo jurídico
En muchos países, como México o Argentina, un reglamento de copropiedad debe ser protocolizado ante notario e inscrito en el registro público. Una vez formalizado, es de cumplimiento obligatorio para todos los copropietarios, incluso si no lo firmaron expresamente.
5. Facilita la administración y gobernanza
Este documento permite designar formalmente al administrador, establecer procedimientos de cobro, definir sanciones y gestionar reservas o uso de instalaciones comunes. De esta forma, se orienta mejor la gestión diaria y las decisiones colectivas.
6. Flexibilidad y participación democrática
Mientras que el reglamento de copropiedad es más rígido y requiere instancias formales para modificarse, el reglamento interno puede ser ajustado regularmente —por ahora, por ejemplo, por una asamblea o comité—, lo que lo hace adaptable a las necesidades emergentes de la comunidad.




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